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Chichén Itzá fue un punto focal importante en la cultura maya, en sus ruinas se encuentra su mayor atracción, la Pirámide de Kukulkán, o El Castillo, una gran muestra de la ingeniería antigua y la precisión astronómica, actualmente considerada una de las maravillas del mundo moderno. Esta pirámide no solo es muestra de los avances arquitectónicos de los mayas, sino también su profundo entendimiento de los ciclos celestiales, que eran fundamentales para sus prácticas agrícolas y religiosas.
Este acontecimiento sin igual en el mundo, da inicio a la primavera en el hemisferio norte, cuando el sol alcanza su punto máximo con respecto a la línea del ecuador celeste.
En este día, al ponerse el sol, un juego de luces y sombras crea la ilusión de una serpiente, Kukulkán, descendiendo por los escalones de El Castillo. Este fenómeno, resultado de la alineación del sol y el diseño de la pirámide, demuestra la capacidad de los mayas para integrar su conocimiento de la astronomía con sus creencias religiosas y habilidades arquitectónicas.
Diferentes creencias giran alrededor de este día, algunas personas dicen que se cargan de energía, por eso visten de blanco o realizan sesiones grupales de yoga durante el equinoccio, otras creencias populares dicen que los brujos renuevan sus poderes y, celebran mediante cantos, limpias con hierba y quema de incienso.
Para los agricultores, significa el nuevo año de siembra, y los guía en el proceso de agricultura tradicional, que les dice cuándo cultivar, y cuándo recoger los frutos del cultivo.
Presenciar el equinoccio de primavera en la ciudad de Chichén Itzá es una experiencia profunda y única, que encapsula el misterio y la grandeza de la civilización maya. El bullicio del día se calma mientras crece la anticipación y el sol comienza a descender, proyectando sombras que lentamente forman el cuerpo de Kukulkán (la Serpiente emplumada). Los aplausos estallan entre la multitud reunida mientras la serpiente avanza, conectándonos con los antiguos que una vez celebraron este mismo fenómeno.
Planificar su visita a Chichén Itzá durante el equinoccio de primavera requiere cierta previsión. Llegar temprano es recomendable para asegurar un buen lugar para apreciar el equinoccio, que en este año, será el día 21 de Marzo, alcanzando su esplendor alrededor de las 4:00 pm.
Explora con anticipación la información sobre tours disponibles, ya sea en línea, o en la agencia de excursiones dentro de tu hotel, para que selecciones el tour que más se ajuste a tus necesidades. Puedes leer acerca del Tour a Chichen Itza que tiene Solaris travel para ti.
Desde la explanada del sitio arqueológico se puede apreciar este gran espectáculo, pero toma en cuenta que no serás la única persona ahí. Estarás sentados junto a miles de personas por lo que hay que tener un poco de paciencia y tolerancia.
Utiliza bloqueador solar biodegradable y alguna gorra (no lleves sombrillas, se respetuoso de las otras personas que también quieren ver el espectáculo).
Durante el equinoccio los asistentes se sientan a presenciarlo. No te levantes a tomar fotos. Sé consciente que hay personas delante, a un lado y atrás de ti.
Si quieres apreciar el fenómeno, pero no estar rodeado de tanta gente, puedes ir hasta 2 días después, aproximadamente a las 4:30 pm, para ver de nuevo a la serpiente emplumada.
Los antiguos Mayas eran grandes matemáticos y astrónomos, la misma pirámide conocida con El Castillo es muestra de ello, ya que consta de 91 escalones en cada uno de sus laterales, más el escalón que lleva al templo, dando un total de 365, los mismos días que nuestro calendario actual.
Para los antiguos Mayas los escalones representan los “18 cuerpos” o meses de su calendario (cada mes tenía 20 días) y los últimos 5 escalones, representan “Los 5 días nefastos”, también conocidos como Uayeb, eran un período de tiempo importante en el calendario maya. Los consideraban días de mala suerte y se asociaban con el inframundo, la muerte y el caos.
Las leyendas indican que el fenómeno del Equinoccio de primavera era presentado ante el pueblo maya como la manifestación del Dios Quetzalcoatl en la tierra y hablaría a través del sacerdote mayor.
El espectáculo de ver como desciende quetzalcoatl dura aproximadamente 5 horas, hasta el punto que 7 triángulos isósceles, se forman mediante la refracción de la luz sobre la escalinata, y junto con la cabeza de serpiente esculpidas en la base, forman el cuerpo de una serpiente que apunta en dirección al cenote sagrado de Chenku.
Esperamos que los turistas que estén acompañándonos durante el mes de marzo puedan tener el placer de presenciar este espectáculo, y los que no, empiecen a reservar sus vacaciones del próximo año para poder presenciarlo. Bueno los dejo, que ya es hora de ir separando mi lugar para poder ver este maravilloso espectáculo.